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De donde soy. Por quГ© estoy aquГ. AВ dГіnde voyВ 2.0. Memorias de un extraterrestre
Valentin Ruzanov
Probablemente nunca te conocГ, ni siquiera te conocГ. ВїDГіnde estГЎ esa joven abierta a un extraГ±o? SГ, pasaron los aГ±os y te volviste mГЎs sabio, y todavГa reconozco a esa chica benevolente en el espejo distorsionado de Facebook. Escribo poesГa basada en recuerdos y trato de hablar de lo que no sabes.Una vez me pareciГі que esta ciudad te estГЎ esperando mucho. AsГ que espera que suenen canciones sobre ti en cada minibГєs.
De donde soy. Por quГ© estoy aquГ. AВ dГіnde voyВ 2.0
Memorias de un extraterrestre
Valentin Ruzanov
AВ mi musa, Brigita Nikitina
Y su fin, ni su lugar, ni su tormento, nadie sabe;
(Doctrina y Convenios, 76:45)
© Valentin Ruzanov, 2021
ISBNВ 978-5-0055-2871-1
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DГa largo, sol abrasador y arena amarilla. Estoy muy cansado. Muy. Fue un viaje largo y no hay vuelta atrГЎs. En una hora oВ hora y media estarГ© en la colonia y todo irГЎ bien. Y conmigo, y con la colonia, y con aquellos por quienes fui. Por supuesto, todo estarГЎ bien, porque no hemos elegido al mГЎs fuerte para nada, el que puede superarlo todo y salvar aВ los que se quedan en la base y estГЎn condenados solo aВ esperar. Esperar es lo que tengo que hacer ahora, y si el manantial es seguro, entonces saciarГ© miВ sed.
Los ojos amarillos buscan y no encuentran nada, se cierran y se vuelven aВ abrir.
La arena en mis ojos me hace mГЎs afilado, pero si no encuentro un acercamiento seguro al manantial, puede ser peligroso. Necesito agua. No puedo vivir sin agua. Tal vez intente encontrarla aquГ cerca. En arena. Y quГ©, los veteranos dijeron que esto sucediГі. Todo lo que necesito es una molГ©cula. Dos de hidrГіgeno, uno de oxГgeno. Dos hidrГіgeno, un oxГgeno… Dos hidrГіgeno…
Una lengua roja sobresale de la boca. Los receptores lentamente se vuelven verdes y se cubren con una pelГcula.
Un oxГgeno… Solo necesito una molГ©cula, de lo contrario… Dos hidrГіgeno, un oxГgeno…
La nariz negra toma varias respiraciones convulsivas, los ojos se abren.
De lo contrario, no encontrarГ© una direcciГіn.
ВЎBote!
En agonГa, escondo mi cabeza en la arena para no sentir dolor.
1.В CERRADO
– ¿Dónde escribiste esto? – el chico me dio una palmada en el hombro y enderezó su sonrisa. Dudé, pero aún dándome la vuelta, notando una buena barra, decidà no delatarme. – ¿YO SOY?
Después de meditar, el chico sacó un pequeño libro. Pasando una página tras otra, comenzó a leer en voz alta. – ¿Y quién eres en realidad? «El diablo», el tipo cerró el libro de golpe con un golpe. – ¿Y qué buscas aqu�
El chico volvió a mirar el libro. – Dice aqui…
Nunca se sabe lo que estГЎ escrito allГ. Pero ven aВ una ciudad desconocida, ponte una corbata y de esta forma sal aВ la calle. ВЎEsto es demasiado! – ВїMe estГЎs escuchando?
Estoy escuchando. Estoy escuchando. Y también estoy buscando un camino al bar. – ¿Cómo entiendes eso? – Ofendiste. Ella no vino. El tipo del libro. Ojos ambar.
(SueГ±os)
2.E = MV ^В 2/2
Entonces, el primer dГa del mes, despuГ©s de haber recolectado todo lo que necesito, salГ aВ la carretera. Cuando salgo de la casa, apago el telГ©fono y tropiezo con una piedra de mГЎrmol. В«AquГ estГЎn las cГЎmaras…»
Girando el guijarro en mis manos, lo arrojo suavemente en mi mochila. Mis intenciones son las mГЎs serias. "ВїEstas esperando aВ alguien?В»
Sacando una moneda de cinco centavos de mi bolsillo, la tiro aВ un soporte publicitario. – DГ©jame adivinar la suerte. Extiendo mi mano. SonrГo ante el buen humor. – ВЎTu tren, gitana! – Nyis.
(Cereza)
3.В ZOMBIS
DespuГ©s del accidente, salgo del coche. No puedo ver nada. Me golpeo la cabeza contra una tabla.
В«DistritoВ ZВ».
Habiendo percibido un olor desagradable, examino los alrededores. Planta de Ashdvao. RГo. DespuГ©s de llenar mi mochila con grava debajo de mis pies, subo al segundo piso para descansar. Los sonidos del metro me despiertan medio dormido.
– La siguiente estación es Park Kultury.
– … y descansar, – grito, esparciendo grava preciosa en la carrera.
(Cavador)
4.В CONDUCTOR
– Si nadie tiene nada que decir, podemos proceder a la conclusión de una unión matrimonial. – Que se besen primero. – No, déjelos firmar primero. Después de observar a la audiencia por un rato, salgo del edificio y le digo al cochero que me lleve con mi prometida. «Yo sé de esta manera», el cochero cobra vida. – ¿Verdad? – ¡Atosh!
Los caballos se dispararon. TambiГ©n querГa agregar: В«Conduce mГЎs rГЎpidoВ», pero fui sacudido con tanta fuerza que apenas tuve tiempo de agarrar mi mochila. Volando mГЎs allГЎ de una tienda con un letrero desconocido, apenas logrГ© transmitirle al cochero que definitivamente deberГamos detenernos aquГ.
ALGUNAS PALABRAS SOBRE SUCEDER
DespuГ©s de un encuentro inesperado, el aspirante aВ escritor emprende un viaje. Impulsado por los recuerdos, abandona su hogar, tratando de devolver lo perdido y ganar lo desconocido.
TIEMPO: acelerado
CULTURA: cyberstim
ROPA: delantal y pitagГіrico
MORAL: – (guión)
5.В ESTILO DEВ ORO
SГЎbado, 6В pm. – Hola. Nos gustarГa reunirnos contigo. Contigo aВ solas. Restaurante В«Zorotaya Spora…» Sporrra… Golden Spur. Siete pi um.В ВїOK?
Reviso tranquilamente los folletos de mГєsica y salgo de la tienda de mГєsica. Diciembre nieve en la cara. Limpiaparabrisas en los semГЎforos. Un paso de peatones, aВ media hora de la carretera por el centro de la ciudad y aВ riesgo de mi vida cruzo la calle frente aВ В«SpurВ». Hay dos figuras congeladas en el banco aВ la entrada del restaurante. – ВЎHalloween! – ВЎHola! Sin embargo, llegas un poco temprano. – Nos encanta este tipo de clima. Llegas temprano tambiГ©n. – Solo caminГ©. Al son del electro-jazz entramos en un restaurante donde no he estado en treinta aГ±os. Luego era solo un cafГ© que atraГa aВ los jГіvenes con una demostraciГіn de dibujos animados japoneses en los reproductores de video reciГ©n aparecidos. – ВїQuГ© vas aВ pedir? – Soy vegano. – ВїPor quГ© razones? – Г‰tico. Los estadounidenses, sin mostrar ningГєn signo, tambiГ©n piden vegetarianos: borscht, patatas fritas, ensalada y agua. – Llevas un estilo de vida saludable. ВїNo quieres dejar de fumar? – No quiero. – ВїEstГЎs satisfecho con todo? – SГ. – ВїAlguna vez has amado? – Dos veces. El primero se casГі con el otro. Todos los contactos del segundo se pierden. – Bien. ВЎTendrГЎs que verte mejor!
Otra media hora de conversación tranquila e incluso las mesas vecinas aprenderán sobre mi sueño de juventud: tocar jazz en Nueva York, la falta de manuales en ruso en ese momento y mi interés por el inglés. Mi historia desinteresada en un inglés fluido se ve interrumpida por un comentario inesperado de uno de los estadounidenses: – ¡Buenas noches!
Siguiendo la mirada del extranjero, me doy la vuelta. Veo los ojos ardientes de una mesera de veinte años que está imperceptiblemente parada detrás de mi espalda, esos ojos están en la audiencia cuando interpretas pasajes virtuosos durante la improvisación. – ¡Buenas noches! – la camarera, algo avergonzada y con una leve sonrisa en el rostro, observa mientras yo, con la boca abierta, vuelvo a mirar a los estadounidenses. – ¡Tienes que verte mejor! Asienten.
(Diciembre)
Noche. Inmerso en pensamientos difГciles, camino por la autopista. Este monstruo de hormigГіn fue construido especialmente por el Гєltimo pretendiente de la princesa para conducir rГЎpido y tener citas frecuentes con ella. Pero segГєn los vecinos, el camino mГЎs corto al Principado es el de hierro. Y muchos, como yo, eligieron este mismo camino. – ВЎOye! Este es mi lienzo, una chica alta y delgada con una chaqueta de cuero bloqueГі mi camino. – Hay una bifurcaciГіn mГЎs. QuizГЎs nos dispersaremos. – Solo hay dos rieles. – ВЎPero hay muchos durmientes! – Ash nyasuprantu lituano. – Y la entiendo muy bien.
6.В EL PERRO EN ELВ MAR
Cuando lleguГ© aВ la bifurcaciГіn, no querГa dar un rodeo y sugerГ. – Hace frГo. ВїPodemos dormir juntos? – ВїSobre hierba quemada? Ni siquiera tenemos una manta. – ВїLe quedarГЎ bien el pajar? Hay uno en el montГculo. – EstГЎ bien, pero solo una noche. Hay una frontera en algГєn lugar cercano. Subiendo el montГculo, nos instalamos en un pajar. No querГa dormir y me acerquГ© aВ la niГ±a. Casi cerca. – Es demasiado temprano. TodavГa no tengo frГo – me hizo aВ un lado con la mano. – ВїCuГЎl es tu banda favorita? – В«AceyВ». – ВїQuГ© vas a? ВЎMГo tambiГ©n! – la frase se pronunciГі en el idioma del principado y la niГ±a preguntГі sorprendida. – ВїConoce este idioma? – Entiendo algo. – Entonces serГЎ mГЎs fГЎcil para nosotros. – ВїNOSOTROS? Dijiste solo una vez. – No tengo frГo contigo. – Bien. Me voy aВ dormir. Tuve una pesadilla en mi sueГ±o. PeleГ© con un tipo grande, pero resultГі ser un debilucho y rГЎpidamente se rindiГі. Luego, despuГ©s de una breve pausa, el juez de ring, pronunciando sus palabras de manera poco natural, anunciГі: – Damas y caballeros. Y ahora es un partido inusual. ВЎEn el ring hay una Violeta incomparable! – el comentarista calentГі aВ la multitud haciendo largas pausas, – ВЎY encantadora Manzanilla! EsquemaВ A.В A.В B.В A. ВЎEl ganador se lo lleva todo!
Dos bellezas deslumbrantes subieron al escenario. Ellos sonrieron. Tiraron el fondo y empezaron aВ golpearme. Su plan estaba resuelto: Manzanilla, agarrГЎndose por detrГЎs, tratГі de llegar aВ mi oГdo con sus dientes, y Violet, parada al frente, siguiГі ajustГЎndose las gafas y finalmente, despuГ©s de calcular la trayectoria, se dejГі caer de rodillas y me mordiГі dolorosamente.. DespuГ©s de la segunda ronda, me dejГ© caer en una silla exhausto y casi entumecido por la sorpresa – mi querida madre con un trapeador saltГі al ring y comenzГі aВ menospreciarme sollozando: – Hijo, me olvidГ© de lo que es el esquema aab. ВЎPerdona aВ Dios! – En las partes A, se utilizan los esquemas establecidos. La parte B consta de algunas mejoras. SonГі el gong. В«Girls from real jazzВ» me golpearon en el estГіmago con la cabeza, me arrastraron por el pelo, y finalmente empezaron aВ verter una mezcla violeta-manzanilla de Chanel sobre los demacrados y derrotados. – MamГЎ, querida – grité – ВЎque tiren la toalla blanca! В«No puedenВ», respondiГі mami, В«se olvidaron de lavarlo. – Bueno, Вїal menos te frotaste el polvo? – ya en el delirio le preguntГ©. – No hay polvo aquГ. Hay heno – respondiГі la voz tranquila de una chica con chaqueta de cuero. – Hay. Sorbete. Heno. Paja, – corrГ hacia la izquierda, luego hacia la derecha, reflejando los golpes imaginarios de mis rivales. В«AcurrГєcate conmigoВ», susurrГі la niГ±a, В«y escucha.
7.В NO HAY MERIENDA
Valyok sacГі la llave y abriГі la puerta del apartamento. El dГa estaba soleado y por lo tanto habГa luz en casa. Estaba hambriento. EntrГі aВ la cocina y mirГі aВ su alrededor. HabГa una sartГ©n tapada sobre la estufa. MamГЎ no estaba en casa. DespuГ©s de quitar la tapa de la sartГ©n, Valyok descubriГі algo raro en la casa en los aГ±os posteriores aВ la perestroika: la carne. ВЎTrozos de carne aВ la brasa! La Гєltima vez que comiГі un plato asГ fue hace varios aГ±os, cuando Banana lo llevГі afuera aВ tocar, y en una hora, con un saxofГіn y una guitarra, ganaron mucho dinero. Y ahora la carne frita estaba tan deliciosa como entonces. El telГ©fono sonГі. Valyok cogiГі el telГ©fono:
– Si A qué hora …? Bueno.
Una hora despuГ©s ya estaba en la estaciГіn y, al notar aВ Fomich, Valera y Pariente, saludГі:
– ¡Oye!
– ¡Oye!
– ¿Te has llevado todo?
– SГ.
– Iré a comprar cigarrillos.
Al regresar, Valyok notГі un tipo extraГ±o en cuclillas junto aВ amigos de pie. El tipo extraГ±o era un tipo completamente inteligente de unos treinta aГ±os, pero oВ habГa algo repulsivo en el tipo, oВ Valek estaba molesto con algo:
– ¿Qué, Fomich, se vuelven a pegar los azules?
Tip se puso de pie en toda su altura y Valyok vacilГі un poco. No hubo pelea. Imperceptiblemente durante la conversaciГіn, se acercГі un tren elГ©ctrico. Habiendo recogido bolsas y mochilas, todos se apresuraron aВ los autos, y el tipo inteligente no se quedГі atrГЎs:
– ¿Llévame contigo?
– No.
– ¡Es una pena!
– ¡Selyavi!
Media hora mГЎs tarde, despuГ©s de haber bajado del carruaje, todos emprendieron un viaje. Lo mГЎs duro del equipaje era el acordeГіn de botones, que se arrastraba por turnos.
Al llegar al lugar, quitarse las mochilas y descansar, no notaron cГіmo se acercaba la noche.
– Bueno, ¿pescando?
– ¿Tienes cañas de pescar?
Un pariente les dio aВ cada uno una caГ±a de pescar, y despuГ©s de desenterrar gusanos y deambular en busca de un estanque durante algГєn tiempo, todos se sentaron en la orilla. No se pescГі ningГєn pez. Una enorme luna amarilla apareciГі en el cielo. En una noche asГ, solo faltaban lobos y hombres lobo.
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